Prensa: PEAU. Plan de futuro para el II Ensanche.

Hacer un uso racional del suelo, evitar la dispersión urbana y revitalizar la ciudad, prevenir y reducir los efectos del cambio climático o favorecer la movilidad sostenible son algunos de los principales objetivos que persigue el Plan Especial de Actuación Urbana (PEAU) del Segundo Ensanche.

Hacer un uso racional del suelo, evitar la dispersión urbana y revitalizar la ciudad, prevenir y reducir los efectos del cambio climático o favorecer la movilidad sostenible son algunos de los principales objetivos que persigue el Plan Especial de Actuación Urbana (PEAU) del Segundo Ensanche. Su redacción la adjudicó el Ayuntamiento de Pamplona a un equipo multidisciplinar conformado por arquitectos, abogados, ingenieros y sociólogos, que iniciaron su trabajo a finales de 2018 y que hace unas semanas presentaron un “diagnóstico y anteproyecto” que será la base del documento final. A partir de ahora quedan dos fases más, una para elaborar un documento tramitable y otra que incluirá las alegaciones antes de la aprobación del PEAU definitivo.

El diagnóstico dado a conocer ahora es la fotografía de un barrio que comenzó a desarrollarse hace un siglo, cuando el derribo de las murallas permitió que Pamplona creciera hacia el sur sobre una extensión de 890.000 metros cuadrados. La primera piedra del Segundo Ensanche de Pamplona se colocó simbólicamente el 29 de noviembre de 1920.

Desde entonces han sido varios los documentos urbanísticos que se han sumado para dictar nuevas normas de ordenación, pero ahora, más que consolidado, el barrio requiere una adaptación que también abordará la reactivación de algunas calles o incluso la búsqueda de un tratamiento específico para que las plantas bajas tengan una identidad propia.

El proceso se aventura largo en el tiempo y las modificaciones, si es que reciben el visto bueno, se llevarán a cabo de forma paulatina, con pausa y sin grandes estridencias.

 

UN BARRIO QUE ENTREMEZCLA LA TRADICIÓN Y LA MODERNIDAD

“El Segundo Ensanche se reafirma como un centro de servicios profesionales y empresariales de prestigio, en el que se entremezclan la tradición y la modernidad”, se señala en el diagnóstico del plan. La actividad productiva está conformada por más de 5.200 centros de trabajo.

En la parte central del barrio el estudio sitúa a la plaza de las Merindades, en cuyo entorno se localiza el 61% de las dotaciones, con múltiples “despachos profesionales, actividades empresariales, comercios selectos y oficinas bancarias”.

El otro punto de atracción se sitúa en la plaza de la Libertad, calificada por los autores del trabajo como “foco activo importante” en el que destaca el asentamiento de profesionales del mundo de la arquitectura y las ciencias sociales. Además, muchos de ellos destinan parte de su residencia en pisos a su actividad profesional.

El Paseo de Sarasate sería el tercer foco, con una concentración de centros laborales y también grandes oficinas.

 

POSIBLE ELEVACIÓN EN ALTURA DE LA VIEJA ESTACIÓN DE AUTOBUSES

El plan recomienda reforzar los equipamientos, pero habla también de crear pequeños espacios de barrio con un destino multifuncional, y pone como ejemplo habilitar salas de reunión para mayores y jóvenes. Sugiere concretamente a la vieja estación de autobuses como un “área de oportunidad” en la que cabría desde su demolición total hasta su mantenimiento, pero elevando su altura para incrementar la oferta de vivienda pública.

Sobre los espacios libres propone revitalizar algunas plazas que tienen actualmente un “tratamiento inadecuado” (plaza de la Cruz, de la Libertad, plaza de la calle Valle de Yerri y plaza de la calle Valle de Salazar), y crear nuevos espacios pensados para el peatón, como áreas de estancia y encuentro, en los cruces de algunas calles (avenida Zaragoza/calle Plazaola, avenida de San Ignacio/Cortes de Navarra y calles San Fermín/Amaya/Aralar). También propone una red para conectar los espacios libres.

UN PARKING EN C/ OLITE O AVENIDA DE GALICIA CON 2.500 PLAZAS




Como no podía ser de otra forma, el PEAU busca también reducir el impacto que supone los vehículos aparcados en las calles del II Ensanche y así, “gestionar el espacio público de una manera más eficiente y sostenible”.

En estos momentos, de acuerdo con los datos del estudio, existen en las calles del II Ensanche unas 3.500 plazas para vehículos (la mayoría de ellas en zona azul) y otras 575 para motocicletas, además de un centenar en paseo de Hemingway, junto a la plaza de toros. Juntar todas esas plazas en un solo aparcamiento en superficie ocuparía, señala el estudio, unos 90.000 metros cuadrados, el equivalente a un cuadrado de cuatro manzanas del ensanche. A este dato hay que añadir las 230 plazas suprimidas junto a los pasos de peatones y otras 1.165 por los nuevos itinerarios ciclistas. Por todo ello los autores no se cierran a la construcción de un parking subterráneo en la calle Olite o en la avenida de Galicia con 2.500 plazas que solucionaría en parte este problema.

 

DESCATALOGAR LUGARES COMO LA PLAZA DE LA CRUZ

El documento del Plan Especial de Actuación Urbana analiza igualmente el patrimonio y el paisaje del Segundo Ensanche por su “indudable” valor patrimonial, y defiende la necesidad de protegerlo y potenciarlo.

Propone además revisar el Catálogo del actual Plan Municipal incluyendo en él nuevos elementos y también modificando algunas protecciones, tanto para reducir el grado de protección con el que cuentan actualmente, como para desprotegerlos totalmente.

Entre los que dejarían de estar protegidos totalmente se sitúan las plazas Príncipe de Viana y de la Cruz, el cruce de la avenida Baja Navarra con la calle Leyre, la calle Navarro Villoslada, y las avenidas Baja Navarra y Carlos III. El motivo que se aduce es que las cualidades por las que fueron protegidos han desaparecido y carecen ahora de cualquier “rasgo de interés”.

Por el contrario sí se incluirían otros elementos en los que se amplía la protección incluyendo la parcela en la que se encuentran (total o parcialmente) porque contiene elementos valiosos. En este caso estarían por ejemplo: la plaza de toros, la casa palacete de la calle Arrieta, el colegio Vedruna en la calle Navarro Villoslada, la iglesia de San Antonio de la avenida Carlos III, la Escuela de Artes y Oficios de la plaza Blanca de Navarra, el edificio de Cáritas Diocesana y la fachada del antiguo cine Alcázar, en la plaza del Vínculo.

Lo mismo sucedería con algunos conjuntos de interés como los edificios donde se encuentran ubicados el mercado del Ensanche o el de la vieja estación de autobuses, así como los conjuntos de las viviendas unifamiliares construidas en la colonia Argaray.

 

LAS MÁS CARAS, LAS VIVIENDAS UNIFAMILIARES

El Plan Especial de Actuación Urbana cifra en 11.855 las unidades residenciales del Segundo Ensanche, de las que el 89% están destinadas a vivienda, y hay casi 1.000 unidades (casi un 8%) vacías.

Ahonda el estudio en analizar la oferta residencial que califica de “amplia y diversificada” si se tiene en cuenta el tamaño, el tipo y el precio. En cuanto al tamaño distingue hasta 5 tipologías que van desde las viviendas de entre 300 y 450 metros cuadrados a las más pequeñas de 81 metros cuadrados de media. En proporción al tamaño se encuentran generalmente los precios: 2.863 euros/metro para las más grandes, situadas principalmente en las proximidades de Merindades. Los precios más caros se corresponden con las viviendas unifamiliares, que no bajan de los 4.500 euros/metro.

En lo que respecta al alquiler, no se localiza en una zona concreta y la renta media es de 119 euros/metro cuadrado. El precio medio del metro cuadrado de oficinas se sitúa en los 1.900 euros.

El estudio cuantifica en 996 las viviendas vacías en el II Ensanche, en 272 las oficinas y en 209 los locales comerciales.

 

LAS VILLAVESAS PASARÍAN POR LA MITAD DE LAS PLAZAS

Buena parte del capítulo dedicado a la movilidad y a la red viaria lo dedica el estudio a desarrollar la avenida Baja Navarra como un corredor sostenible, y analiza los estudios recogidos en el Plan de Ciclabilidad y en la Red Troncal del Transporte Público para concluir que con la actual sección no tendrían cabida las bicis, el transporte y los vehículos.

Señala el PEAU que convertir Baja Navarra en un eje de la movilidad sostenible “requiere la adopción de medidas de regulación del acceso al Segundo Ensanche” como eliminar el tráfico de paso que la recorre. En ese caso plantea un carril bici en la calzada y paradas del transporte de la manera convencional, en mitad de la calzada, o una vía ciclista segregada y paradas del transporte dispuestas al tresbolillo.

Esta nueva sección influiría en la disposición de las plazas de Merindades, Príncipe de Viana y plaza de la Paz, puesto que el transporte comarcal pasaría por la mitad, eliminado en los dos primeros casos las fuentes luminosas, y allí mismo se localizarían las paradas. De esta forma se necesitarían pasos de peatones para unir el centro de la plaza con las aceras perimetrales.

 

AUMENTAR ALTURAS DE EDIFICIOS EN LEYRE, OLITE Y GARCÍA XIMÉNEZ

El plan para el II Ensanche respalda el mantenimiento generalizado de las edificaciones existentes, a la vez que fomenta la rehabilitación de una forma directamente relacionada con la accesibilidad, la eficiencia energética y la habitabilidad.

Fija también el número máximo de plantas de las edificaciones, siempre dependiendo de la sección de la calle en la que se encuentran y de la integración en el entorno, por ello hay dos posibilidades: la conservación del edificio permitiendo incluso el aumento de edificabilidad elevando nuevas alturas, y la renovación o sustitución del edificio.

En la primera de estas categorías se ofrece un listado de edificios que podrían aumentar de altura, localizados todos ellos en las calles Leyre, Olite y García Ximénez. La segunda posibilidad es la que habla de posibles demoliciones para construir nuevos inmuebles en las calles Amaya, Arrieta y Olite.

 

EL ENTORNO DE MERINDADES, EL MÁS POBLADO Y ENVEJECIDO

La centralidad de la plaza de las Merindades la convierte en un área “densamente poblada”, aunque sea una población “envejecida y estancada”. La amplia dotación de servicios y la oferta inmobiliaria llevan a considerarla como zona de “prestigio, confianza y respaldo económico”. Viven en ese entorno unas 7.200 personas con un nivel de envejecimiento superior al 24%.

La avenida de Zaragoza coge aquí el testigo como eje de la actividad productiva donde viven unas 5.100 personas, con un nivel de envejecimiento similar al anterior.

En la parte sur es la plaza Blanca de Navarra la que marca el territorio, con unos 5.200 habitantes y un índice de envejecimiento inferior (22%). Aquí el nivel de los centros productivos es inferior y predomina el comercio de proximidad y los servicios profesionales técnicos. Muy cerca se localiza el ámbito de la plaza de la Libertad y la calle Aoiz, una zona muy poblada, más joven y cifrada en unos 4.350 habitantes.

Al noroeste, el Paseo de Sarasate y El Corte Inglés destacan por su “fuerte atracción comercial”, menor población (1.300 residentes) pero más envejecida que el resto. El último ámbito lo conforman las viviendas unifamiliares de Argaray y Media Luna, donde apenas hay comercio. Sí se constata una gran actividad en el mercado de la vivienda.

 

DATOS

11.800 vecinos tiene el Segundo Ensanche de Pamplona. El 23% tiene más de 65 años.

El 63,6% de los vecinos son inactivos.

5.200 centros de trabajo hay en el II Ensanche. Buena parte de ellos se localizan en oficinas.

Plaza de Merindades. Está considerado como el espacio central del barrio y en su entorno vive el 61% de la población del II Ensanche, unos 7.200 vecinos.

272 Oficinas. Son las que no están en uso actualmente.

7% es el porcentaje de emigrantes del barrio. La cifra va en descenso y la mayor parte, más de la mitad, procede de América Latina.

 

NOTICIA AQUÍ

💬 ¿En qué podemos ayudarte?